El pasado mes de abril, aprovechando que teníamos un largo puente vacacional y que teníamos un compromiso deportivo en el desierto de los Monegros, decidimos subir hasta Andorra y comprobar en primera persona las posibilidades que nos ofrece el País de los Pirineos a los autocaravanistas.
Vitoria – Sariñena (25 de abril)
El 26 de abril íbamos a participar en la maratón BTT que organiza cada año la marca de bicicletas Orbea en el desierto de los Monegros. La organización de la prueba anunció que iba a haber dos zonas habilitadas para autocaravanas.
Sobre las 21:00 llegamos a Sariñena, población de acogida de la prueba y la primera zona ya estaba completa, por lo que nos desviaron a una segunda. Resultó ser un campo de labranza, el cual no se encontraba alisado y estuvimos a punto de no poder salir de allí. Nos quedamos medio atrapados en un surco de tierra, del cual salimos balanceando la autocaravana.
Con un fuerte olor a quemado por el esfuerzo al que sometimos al motor, nos achuchamos en una de las plazas del primer parking, pero el afinamiento, el olor a ganado y lo lejos que nos encontrábamos de la zona desde donde salía la carrera, hizo que nos planteáramos buscar un sitio mejor. Un amigo que suele ir con su auto nos dijo que aparcásemos en un parking cercano al recinto ferial, mucho más tranquilo y asfaltado.
En primer lugar, agradecer a los que organizan este evento por tener en cuenta la cantidad de gente del mundillo MTB que nos movemos en autocaravana, pero recordarles que no somos vehículos 4×4. Habilitar una zona no es dejar aparcar, sino que requiere una preparación previa del terreno. Además les invito a dormir dos noches en una zona que se usa habitualmente para celebrar ferias de ganado, a ver si les quedan ganas de volver.
Sariñena – Encamp (27 de abril)
Pasada la maratón, el domingo 27 de abril pusimos rumbo a Andorra, donde llegamos en unas 3 horas y media. Nuestro primer objetivo era el área de autocaravanas de Encamp, pero al llegar al lugar indicado, una terrible cuesta nos hizo dudar, por lo que seguimos adelante.
Nos salimos de la localidad sin ver un lugar adecuado para detenernos, así que en una rotonda a la entrada de la siguiente población nos dimos la vuelta y paramos en uno de los miradores junto a la carretera. Valoramos nuestras opciones y decidimos darle una segunda oportunidad al espacio marcado como Área Servicios para autocaravanas.
La estrecha y vertical entrada, se encuentra junto a una rotonda, así que con la primera marcha metida y armados de valor, subimos por el escalonado parking. El primer rellano es donde está la zona de carga y descarga de aguas (grises y negras). Nuestro primer chasco vino al ver que el armario donde se encuentra la toma para cargar el agua estaba cerrada con llave. El segundo vino al abrir la tapa de la zona preparada para las aguas negras y ver que estaba atascado y desbordado.
Abrimos la trampilla donde se vacían las aguas grises y vimos que la gente lo había usado para las negras también. No es algo que nos guste hacer, pero en ocasiones la necesidad obliga, así que vaciamos todo allí.
Había un cartelito donde ponía que la llave del armario de las tomas de agua se solicitan en la oficina del remonte que está justo enfrente nuestro. Bajamos a por ella y ahí vino el tercer chasco del día, desde el 27 de abril hasta el 26 de julio se encuentraba cerrado, así que no había nadie que nos dejara esa llave. En la nota también ponía que permanecería abierta del 15 de julio al 15 de septiembre.
Antes de dar la vuelta para enfrentarnos por segunda vez a la rampa del AS, habíamos visto un parking con una fuente, así que arrancamos y nos dirigimos allí para llenar el depósito. Con un sistema de embudo y la garrafa de agua, cargamos el depósito con agua fresca y cristalina, proveniente de la montaña.
Un poco cansados del viaje, decidimos volver al vertiginoso parking, pero en vez de quedarnos en el primer piso, subimos hasta el 4º de los 5 que hay. Había un parquímetro, pero la autocaravana aparcada allí, al igual que varios coches y remolques del 5º parking, nos hizo suponer que no se encontraban en activo.
Ya posicionados y con ganas de estirar las piernas, nos fuimos a investigar un poco las ruinas que habíamos visto desde la carretera pertenecientes a la Ermita Sant Romà de les Bons y Torre dels Mors.
Un suave paseo nos lleva a estas joyas arquitectónicas, las cuales acompañadas de un precioso atardecer, arreglaron un día que no parecía que fuese a acabar bien del todo.
Cuando volvimos a la autocaravana, se nos había aparcado cerca una furgoneta camper, así que dormimos acompañados.
- AS Encamp: N42º 32´09” – E1º 35´23”
- Fuente: N42º 32´48” – E1º 35´31”
Encamp – Andorra La Bella (28 de abril)
Después de pasar una noche tranquila en el área, nos dirigimos al Balneario Caldea (Andorra), con la idea de recomponer las fuerzas perdidas en la prueba deportiva. Aparcamos la autocaravana en el Parc Central, un parking céntrico y abierto de 07:00 a 23:00, que cuenta con plazas específicas para autocaravana. Para entrar al parking hay que hacer un giro de 90º y accedes a la barrera por una zona un poco estrechita, sobre todo si hay alguno mal aparcado por allí.
Bolsa en mano, fuimos al balneario Caldea, donde nos convencieron para entrar en la zona INUU, wellness attitude (www.inuu.com). La zona del balneario tradicional está orientado hacia grupos y familias, mientras que la zona Innu, es más tranquila y nueva. Cuando nos comentaron que acababan de entrar dos grupos grandes en la zona de Spa tradicional, no lo pensamos dos veces y entramos en la que es más exclusiva. Contratamos un par de masajes, así que la broma nos salió por 240€.
Personalmente, no nos gustó demasiado la experiencia Inuu, ya que se trata de una piscina con distintas alturas, donde encuentras los mismos tipos de chorros. La zona de sauna y duchas es bastante básica, ya que en otros balnearios o zonas Spa donde hemos estado encuentras más instalaciones y variedad, sin tanta parafernalia y más económico.
La entrada para esta zona incluye una comida en el restaurante que está pegado a las piscinas, con primero y segundo plato, pero no el postre ni el café. Además puedes entrar con el albornoz, cosa que hicimos para no perder tiempo, pero fue un error porque nos quedamos helados.
Después de comer nos dieron los masajes y descansamos en una sala muy cómoda con buenas vistas a un parque mientras tomábamos un refresco.
Con una extraña sensación de relax y decepción, volvimos a la autocaravana y regresamos al AS de Encamp, ya que se encuentra a escasos 15 minutos de ahí y el conocer la zona, nos daba cierta tranquilidad.
El precio del parking, por 11 horas que estuvimos allí aparcados, fue de 11,65€
Parc Central: 42.505167, 1.526193
Encamp – Valle de Ordino (29 de abril)
Después de dormir como lirones, el cuerpo nos pedía actividad, así que nos dirigimos al Valle de Ordino, para hacer la que iba a ser nuestra ruta estrella gracias a la info de Koldos (http://www.acpasion.com/pdf/viajes/koldos001.pdf), el Circo Glaciar de Tristania. Digo “iba”, porque la cantidad de nieve que se acumulaba todavía en las montañas y en la ruta y el alto riesgo de aludes, nos hicieron anular la excursión.
Subimos por la carretera que va a la estación de esquí de Vallnord, hasta que nos encontramos con unas verjas que cortaban el paso debido a la nieve acumulada. Aparcamos la autocaravana allí mismo rodeados de montañas nevadas y un cielo azul espléndido.
Como hacía un día precioso, decidimos seguir andando hasta la siguiente estación de esquí y donde empezaba la ruta al Circo de Tristania.
Ataviados con nuestro material de senderismo, recorrimos a pie los dos últimos 2 km por una carretera llena de nieve y hielo que nos superaba en altura. Las vistas eran espectaculares.
Una vez en las pistas de arriba, la visión de una caseta sepultada por la nieve confirmó lo que nos temíamos. Los caminos estaban ocultos y la zona poco transitable.
Valoramos la situación y decidimos volver a la autocaravana, ya que no disponemos ni de material ni de capacidad técnica suficiente como para hacer una ruta en esas condiciones…otra vez será… así tenemos excusa para volver otra vez.
Como todavía era prontito, decidimos hacer una ruta más cortita y a menos altitud que teníamos apuntada gracias a Koldos y que nos pillaba de paso. De vuelta en la autocaravana, nos dirigimos al Parque Natural de Sorteny e hicimos una ruta de 5 km que sale del parking del centro de interpretación y va por el llamado sendero botánico hasta el refugio de Sorteny.
La ruta es bastante accesible y muy recomendable. Pasear por el estrecho valle junto a un caudaloso río, te recuerda que estás en el Paraíso de los Pirineos.
Si queréis hacer la ruta, podéis descargarla de Wikiloc:
Sendero botánico-Refugio Sorteny
Tras la caminata, nos dirigimos de nuevo al área de pernocta de Encamp para pasar la noche, ya que estábamos a escasos 45 minutos de allí.
Con algunas bajas en la despensa, hicimos unas compras básicas en el supermercado que se encuentra bajando del parking a la derecha. Nos sorprendió ver que los precios de Andorra se han equiparado a los de España.
Aquí tenéis un vídeo de la ruta:
Encamp – Lago de Engolasters (30 de abril)
Nos levantamos de nuevo con buen tiempo, así que nos dispusimos a realizar dos rutas que teníamos apuntadas: el Lago de Engolasters, cerca de la localidad de Encamp y Escaldes en Andorra y una ruta por el Valle de Madriu-Perafita-Claror.
Leímos que el lago de Engolasters es una zona cargada de misticismo. Se dice que es el refugio de hechiceras llegadas de todo el mundo y, según cuentan las leyendas, las brujas se reunían allí para celebrar sus aquelarres. Así que con esas historias en la cabeza, nos pusimos en marcha.
La carretera que sube al lago (el lago se encuentra a una altura de 1,500 metros) termina en el parking privado de un restaurante, así que nos dimos la vuelta y dejamos la autocaravana en otro parking más abajo, justo en una curva, y subimos andando hasta el comienzo de la ruta, justo en el parking del primer restaurante.
Un pequeño paseo entre árboles nos llevó hasta el lago, donde no encontramos mujeres cantando y bailando desnudas, sino que encontramos familias pescando y pasando la mañana.
Hay varios restaurantes alrededor, un bike park, un parque de aventura y hasta un mini zoo propiedad del primer restaurante que hay al llegar.
El paseo no está mal, pero tampoco es para echar cohetes, así que volvimos al coche e hicimos una segunda ruta que sale del parking donde habíamos dejado la auto, la Ruta de las Fuentes, la cual tampoco mejoró mucho la mañana. Se trata de una sencilla ruta por un camino totalmente accesible que recorre una ladera donde encuentras diversas fuentes naturales hasta llegar a un merendero.
No digo que sea una ruta fea, pero nosotros íbamos con la idea de hacer rutas más de montaña, pero al truncarse los planes por la cantidad de nieve, estos paseos nos resultaron algo frustrantes.
La ruta podéis descargarla aquí:
Aquí os dejo un mini vídeo de la ruta:
De vuelta en la autocaravana, comimos y pusimos rumbo hacia la ruta estrella del día, en la cual teníamos grandes expectativas: el Valle de Madriu-Perafita-Claror, declarado como Patrimonio de la Humanidad por la Unesco en el año 2004 y ampliado el 2006.
Sin unas coordenadas concretas ni mucha información, dimos mil vueltas a la misma zona sin encontrar el inicio de la ruta ni el parking para dejar la autocaravana. Así que un tanto frustrados por no encontrar el punto de acceso, aparcamos en Parc Central y nos acercamos a la oficina de turismo, con la esperanza de tener unas coordenadas concretas.
Allí nos explicaron donde se encontraba el punto de inicio de la ruta y que no había una zona de parking como tal sino que se dejaba el vehículo en el arcén. Nos tranquilizó diciendo que allí la policía no era como en España, y salvo que seas muy cafre aparcando, no te multaban.
Como con tanta vuelta se nos había hecho tarde para hacer la ruta, aprovechamos y nos dimos una vuelta por la capital y su zona comercial. Las sospechas que teníamos sobre los precios de Andorra, se confirmaron. Han subido mucho, siendo en ocasiones más caros que en España. Lo único que mereció la pena fue una tienda de deporte muy grande que tiene 4 plantas, donde las ofertas no están mal. Ahí aprovechamos para comprar algo de ropa técnica.
Ese día decidimos probar el AS del Centro Comercial River (Sant Juliá). Al principio las coordenadas no nos situaron bien, ya que nos llevaban a la gasolinera del centro comercial pero tras echar un vistazo, nos dimos cuenta de que había que salir a la carretera y después de la segunda gasolinera (dirección Andorra-España), girar a la derecha por una entrada estrechita. Ese camino lleva a un parking grande, junto a un rio, donde había un montón de autocaravanas aparcadas.
Se trata de un parking asfaltado junto a un río donde comparten espacio remolques de camión, coches y autocaravanas. La zona de carga y descarga se encuentra al fondo del parking y está bastante bien.
Después de cenar, reorganizamos los planes que teníamos para Andorra y decidimos dar al día siguiente una segunda oportunidad a la ruta del Valle de Madriu-Perafita-Claror.
Area CC River: N42º 27´12” – E1º29´08”
San Juliá – Valle de Madriu – Perafita – Claror (1 de mayo)
Después de dormir plácidamente con el sonido del río, las cosas se ven mejor, así que con el ánimo alto y el solete mañanero, nos pusimos rumbo al valle.
Esa mañana había más coches aparcados junto al cartel de inicio de ruta, así que dejamos la autocaravana lo más ajustada que pudimos e iniciamos el trekking (N42º 30´14” – E1º 33´05”).
Se trata de una ruta de 6 kilómetros de subida, con un ascenso cercano a los 700 metros de desnivel. El camino es de losas y bastante empinado pero tiene bastantes accesos al río, donde es recomendable parar y disfrutar del paraje que nos rodea, sobre todo si vas con un perro como el nuestro, que se tiene que refrescar cada poco.
Después de una dura subida amenizada por parajes espectaculares, y haciendo paradas cada dos por tres para hacer fotos, llegamos al refugio de Fontverd donde nos comimos los bocatas con el refugio a nuestras espaldas, con un río de alta montaña a nuestros pies y las cumbres nevadas al frente, formando una conjunto difícil de olvidar y dando sentido a todo lo que nos había costado llegar hasta allí.
Entre subida, bajada, bocatas, fotos, etc., pasamos un total de 8 horas que hicieron que el viaje a Andorra hubiese merecido la pena.
Esa noche la pasamos también en el parking del Centro Comercial River, donde llenamos el depósito para dejar los deberes hechos para el día siguiente.
Vídeo de la ruta:
San Juliá – Vitoria (2 de mayo)
Teníamos dudas sobre cuando volver a casa, ya que las previsiones meteorológicas no eran muy halagüeñas, pero el tiempo se portó bien y no empezó a llover hasta ese viernes por la noche. Para el sábado había aviso incluso de nevadas, así que no quisimos tentar más a la suerte y el 02 de mayo pusimos rumbo a casa.
La conclusión es que Andorra es un país muy especial, el cual puedes recorrerlo de punta a punta en un máximo de hora y media. La subida de los precios le ha hecho un gran favor, ya que de esta manera puede quitarse la fama de ser el paraíso de las compras, para dar paso a sus verdaderas virtudes, las preciosas rutas de montaña. Cualquier aficionado a la naturaleza encontrará rutas adecuadas a su nivel y seguro disfrutará mucho de cada una de sus excursiones.
Viajero3000
Una manera impresionante de disfrutar del principado junto con todos sus encantos. Gracias por el artículo y un saludo
ac-viajero
Gracias por comentar!
Anónimo
Fenomenal, como siempre. Me anoto este viaje para un futuro próximo