LLegó el verano de 2010 y, con nuestra nueva autocaravana, decidimos estrenarnos por la Bretaña francesa y después volver por Perigord (Francia). Ya habíamos estado el año pasado por la zona norte y con una furgoneta, alquilando una casa rural pero, como os podéis imaginar, no nos dió tiempo a ver todo.
Este verano, lo que nos gastamos el anterior en el alquiler, nos lo podremos gastar aumentando los días de vacaciones y recorriendo más kilómetros. Esto de la autocaravana es una gozada…
Vitoria-Gasteiz – Le Porge, Aquitania (19-20 julio de 2010)
Distancia: 364 kms
Pernocta: Camping Municipal La Grigne ** (Le Porge), (N 44º 53′ 41»- O 1º 12′ 16», 29 € día).
Nos proponemos subir a la zona de Finisterre, en la Bretaña francesa, costeando y luego bajar a Perigord para terminar nuevamente en Las Landas, manejando siempre las dos opciones de pernocta, área para autocaravanas o camping, dependiendo de la impresión que nos den las áreas al llegar, ya que es nuestro primer gran viaje con nuestra nueva autocaravana.
Salimos de vitoria a eso de las 10:00 tras estar unas horas cargando la AC, tratando de no olvidarnos de nada…pero como siempre, algo se queda, la olla express…cocinaremos al modo tradicional…de tarro…jaja.
La idea es coger fuerzas huyendo del duro invierno Alavés y pasar dos días en la playa de Le Porge, Aquitania, valorando el área de AC de Lége Cap Ferret, por lo que con la idea de ahorrarnos un par de horas, vamos por Autopistas y antes de llegar a la frontera con Francia, empieza el ritual de los peajes: 1,95€ el primero, 2,40€ en la frontera, a la altura de Biarritz, 3,30€ y 5€ al llegar a Capbreton.
Llegamos al área de AC prevista en Lége Cap Ferret, pero está realmente lejos de la costa, sobre todo cuando la idea era descansar estos dos primeros días, así que sin pensarlo tomamos rumbo a la segunda opción, el Camping Municipal de Le Gringne, con acceso directo a la playa (tras andar 500 mtrs. entre dunas). Al llegar, nos acomodanos en nuestra parcela, solventando antes un problema con un “listillo” que nos había quitado la toma de corriente que nos correspondía, echando un cable de 50 mtrs desde 5 parcelas mas allá. Dimos una vuelta por la playa en un día ventoso, pero muy a gusto.
El camping, para ser municipal, no es que sea una ganga, 29€ el día. Además, hay que tener en cuenta que hay que pagar el día anterior a la marcha antes de las 18:00 y abandonarlo antes de las 12:00, vamos, lo normal. Suelo de arena, relatimamente llano, bastantes árboles y sombra, duchas y WC mixtos, supermarket y Surf camp. El punto negativo, la cantidad de resina que desprenden los árboles, que mancha muchísimo.
Le Porgue – La Roche Bernand (21 julio)
Distancia: 460 kms
Pernocta: camping Municipal Le Pâtis*** (N47º31.214´-W2º18.327´, 11,40 € día).
Tras cargar pilas en la playa y marcharnos del Camping “la Grigne” sin encontrar el area de descarga de aguas grises, tomamos rumbo a nuestro siguiente destino, La Roche Bernard.
Un viaje largo y aburrido por autopista, con un peaje de 36€, el cual nos ahorraba cerca de 2 horas de viaje respecto a la ruta “turística”.
Llegamos al Camping de “Le Pâtis”, el cual nos ofertaba diversas opciones: parcela, zona forfait Campingcar o zona exterior del camping, con posibilidad de tomas mediante monedas (2€ 10 mins agua o 55 mins electricidad). En la plaza de entrada al pueblo, junto al cementerio, hay un parking donde se puede pernoctar sin problemas. Nosotros nos decidimos por la opción del forfait a 9€ por la AC+2 personas, 2€ por el perro y 0,20€ de impuestos por persona. Todo ello con acceso a toma de corriente, carga y descarga, baños muy decentes con un código numérico para entrar. Las plazas en esta zona son más ajustadas que en las del camping, pero para sacar un poco el toldo y la mesa…suficiente.
El camping tiene acceso directo al puerto pluvial, lo cual invita a un paseo al atardecer por la zona y, andando andando, se llega al pueblo con unas vistas preciosas.
La Roche Bernard – Rochefort en Terre – Vannes (22 julio)
Distancia: 80 kms
Pernocta: Area para autocaravanas del Camping de Conleau (N47º37.979´-W2º46.805´, 11 € día).
Por la mañana, tras abandonar el camping, aparcamos la AC en el parking junto al cementerio y recorrimos el pueblo, el cual cuenta con construcciones de los Siglos XV-VXII. Realmente merece la pena perderse por las calles más antiguas, con zonas de artesanía, casas típicas francesas de la época, y culminar el paseo con las vistas del puerto.
La visita no nos llevó más de dos horas, así que tomamos rumbo a nuestra siguiente parada, Rochefort en Terre, precioso pueblo medieval por donde da gusto pasear, curiosear en las tiendas de artesanía y dejarse envolver por la magia del lugar.
Al llegar, aparcamos en la entrada del pueblo junto a la carretera, en una zona amplia, pero más tarde vimos que existía un parking junto al cementerio (esta dinámica de parking AC junto al cementerio se empieza a repetir…¿tendrá algún sentido?¿?).
Finalmente, tras andar unas 3 horas por el pueblo y verlo todo, decidimos acercarnos al que sería nuestro próximo destino, Vannes. Fuimos al Camping Municipal de Concleau, cuyas tarifas en el área de camping car son 10,70€+0,15€ el impuesto por persona. Por el perro no nos cobraron, aunque sinceramente, creo que no nos entendieron muy bien, ya que las tarifas por el perro eran de 1,50€. Evidentemente, no les corregí y todos tan contentos.
El área era una zona asfaltada, con líneas delimitando los aparcamientos y tomas de corriente relativamente cercanas, dependiendo de la plaza que se coja. Además, cuenta con una zona de vaciado y carga de aguas.
El camping está junto a un puerto deportivo y playas artificiales, por lo que el paseo al atardecer es obligado. Al día siguiente atacaríamos Vannes.
Vannes – Carnac (23 julio)
Distancia: 50 kms
Pernocta: Area para autocaravanas de Quiberon (N47º-30.696´-W3º08.341´)
Tras levantar el campamento, en el área vivimos el típico momento de risas nerviosas y saludos gentiles, pero sin perder de vista al “vecino” por ver quien llega antes a la zona de carga y descarga de aguas. La inexperiencia nos ha dejado en un triste 4º lugar, así que…tras media hora de espera salimos hacia Vannes.
En Vannes, intentamos aparcar en el parking de la Libération, de pago, pero al no haber sitio, aparcamos en el parking gratuito de la place Nazareth, junto a la policía.
Es una ciudad grandecita, llena de tiendas y con un bonito paseo junto a un pequeño puerto. Como en todos los pueblitos que visitamos, tenía las típicas casas medievales de colores con entramado de madera y unas murallas rodeadas de bonitos jardines para pasear y relajarse.
Visitamos la zona amurallada de la ciudad y comimos un burrito mexicano en un Kebap junto al puerto. Después, pusimos ruta hacia Carnac para ver los “alineamientos megalíticos” y de paso conocer los tan visitados parkings de la zona famosos como áreas de pernocta. Sinceramente, no son para echar cohetes ya que no tienen ningún servicio, ni nada que ofrezca el entorno ya que, para ser sinceros, los “alineamientos megalíticos”…dan para lo que dan.
Finalizada la etapa cultural del día, nos acercamos hasta Quiberon, donde habíamos localizado un área con servicios en el GPS, que finalmente resultó ser un parking de pago un tanto extraño, así que, como por el camino habíamos visto varias áreas señalizadas, echamos el ancla en el área 56, Saint Pierre Quiberon, junto al polideportivo, donde el ver otras AC ya nos dio confianza. El sitio cuenta con suelo asfaltado y el típico poste de “pago por servicios”, el cual usamos por la mañana para vaciar el wc, rellenar y vaciar aguas. Se usa metiendo la tarjeta de crédito, seleccionando la opción a usar, 1: corriente 55 minutos y agua 10 minutos.
Quiberon – Concarneau (24 julio)
Distancia: 107 kms
Pernocta: Area AC Concarneau (N74º 52.716´-W3º55.233´, 2€ parking+4€ poste servicios)
Durante la mañana y hasta la hora de comer visitamos la “Côte Sauvage”, llena de acantilados y calas azotadas por el viento del Atlantico. Vimos algunas áreas y parkings donde se podía pernoctar, pero sin servicios, siendo el área AC más cercana a Quiberon la más grande y con mejores vistas, además, se encuentra de Quiberon a un paseo.
Lo más frustrante fue encontrar la mayoría de los parkings cercanos a las calitas limitados en altura y uno de ellos con prohibición específica para aparcar las autocaravanas.
Nos costó un rato aparcar en el pueblo, ya que nada más entrar encontramos un cartel de prohibido aparcar las autocaravanas pero, cerca del SuperU, aparcamos en el parking de la Resistaince, gratuito 4 horas y donde había que dejar un papel a la vista indicando el horario de llegada.
Comimos unos panninis en el bonito paseo marítimo y tomamos rumbo a Concarneau, acampando en un área enorme, tipo parking, compartida con coches y camiones, donde cada tipo de vehículo tenía su zona, existiendo poco espacio entre las ACs.
El área de pernocta dispone de un poste de servicios, como el que ya va siendo habitual en las áreas. Nos asustó el tiempo que se puede llegar a perder por la mañana, por el volumen de Autocaravanas que había en el área.
Como llegamos relativamente pronto, dimos un paseo desde el área al pueblo y en 10 minutos estábamos ya en la zona turística, en una península amurallada que nos trajo recuerdos del Mont Saint Michael. Destacar el precioso atardecer con el puerto de fondo.
Concarneau – Pont-Aven – Locronan (25 julio)
Distancia: 60 kms
Pernocta: Area de pernocta de Locronan (N48º 05′ 52″ W4º 12′ 43″, 5€ pernocta con poste de agua incluido)
Tras levantar el campamento, nos dirigimos al idílico pueblo de artistas “Pont-Aven”, donde aparcamos en el área AC junto al estadio Henri Sinquin, tipo parking, con servicios de aguas por 2,50€ (monedas). En un par de horas, estaba “todo el pescado vendido”, así que volvimos a la AC, comimos y pusimos rumbo a Locronan.
Según el planing, teníamos previsto visitar Point du Raz, pero como estaba el día algo gris, lo dejamos para el día siguiente.
A 4 kms antes de nuestro destino, vimos un SuperU, con el gasoil bastante barato para ser Francia, así que no perdimos la oportunidad de rellenar el depósito y comprar algo de dulce y sidra bretona dulce (buenísima, os la recomiendo).
Locronan es una pequeña ciudad del s. xv que merece mucho la pena visitar ya que el pasear entre sus calles te trasladan a una época anterior.
El área está justo a la entrada del pueblo, por lo que puedes disfrutar de los crepes y las tienditas de artesanía a pocos pasos. Así tenían que ser todas las áreas, campestres y cerquita del centro turístico.
Locronan – Point du Raz (26 julio)
Distancia: 15 kms
Pernocta: Area AC Point du Raz (N48º02.202 -W4º43.040, 5€ parking o 15 € pernocta)
Tras levantarnos en Locronan y dar nuevamente una vuelta por sus magníficas calles, nos dirigimos a Point du Raz, un espacio natural donde se pueden contemplar fantásticos acantilados y uno de los famosos faros que suelen aparecer en los posters con olas gigantes.
La zona de pernocta la verdad es que era un tanto austera y cara, 15€ la pernocta, sin servicios y bastante inclinada pero, ¿quién puede resistirse a acostarse y levantarse en un paisaje tan fantástico?. Hay una zona de restaurantes, WC y tienditas de recuerdos, como siempre, supercaras.
Resaltar que la bruma se cierra, y mucho, por la tarde noche y por la mañana, y aunque nos habían dicho que el atardecer era increíble, no tuvimos ocasión de verlo con la dichosa bruma, pero eso sí, fuimos otra vez hasta el faro para sacar unas magníficas fotos con el cielo negro, trágico, con los rayos del sol que salían entre las nubes iluminándolo, como tocado por la luz divina.
Por la noche, antes de acostarnos, salimos de la AC para ver el mar y tuvimos la suerte de coincidir con la luna llena y creedme, cuando os digo que a las 0:00 el mar y los acantilados, iluminados por una enorme luna, que luchaba por desprenderse de las nubes, nos presentó una imagen que quedará en nuestro recuerdo por mucho tiempo.
Pont du Raz – Quimper – Josselin (27 julio)
Distancia: 150 kms
Pernocta: Área de pernocta de Josselin (N 47º 57.375´ 2º 33.035´, 2,05€)
Por la mañana, la bruma era intensa así que, recogimos el “chiringuito” y nos pusimos rumbo a Quimper, pasando antes por alguna de las áreas (poste servicio) que habíamos dejado atrás. El poste del área de Plogoff estaba ocupado, así que fuimos al de Cleden Cap Sizun, pero el Poste Servicios estaba bastante deteriorado y el vaciado WC hecho una guarrada, así que pusimos rumbo a Quimper y a algún área cercana.
Llegamos al área de Plomelin ( N 47º 56.050´ W4º09.091´), dentro de un complejo deportivo del pueblo y enfrente del colegio de primaria, donde aprovechamos a llenar, vaciar, ducharnos, comer y volver a llenar. El poste de servicios cuesta 2€ y sólo acepta monedas de 2€ (qué raro).
Tras ver Quimper, nos dirigimos a dormir al pueblo de Josselin, donde hay un área – parking con servicios (para 100 plazas), donde conocimos a una pareja de autocaravanistas franceses muy majos que nos invitaron a visitar la zona donde viven ofreciéndose a hacernos de guías, incluso nos dieron un mapa con las áreas AC de allí, por las provincias de Meuse y Haute-Marne.
En un principio, la idea era haber seguido por la costa hasta Roscoff para después bajar a Josselin y enfrentarnos a la ruta trazada por Perigord, pero un repentino cambio de idea, nos llevó rumbo a Paris y a Eurodisney (es una gozada el poder cambiar de idea cuando se te antoja, sin tener ataduras ni rumbo fijo).
Josselin – Paimpont (28 julio)
Distancia: 35 kms
Pernocta: Área AC Paimpont (N48º 01.368´-W2º 10.245´, 2,05€)
Tras recorrer las calles de Josselin, ver el magnífico castillo y estar a punto de alquilar un bote (15€ ½ hora) para navegar por el rio que cruza el pueblo, nos dirigimos rumbo a Paimpont con idea de ver la tumba de Merlín y la fuente de la eterna juventud.
Una vez vista la fuente, más que eterna juventud…en caso de beber de ahí, eterna puede ser la pirrilera que puedes pillar, cosa que no ha parecido importarle mucho a una turista alemana, que ha metido en ese “agua” los brazos hasta los codos!!.
A quien le interese visitar dicha zona, el parking para ver la Tumba (las 4 piedras) está en N48º 04.642´-W2º 07.133´ y la famosa fuente de la eterna juventud en N48º 04.717´-W2º 06.910´.
Tras dar una vuelta por la zona, volvimos a Paimpont, donde existen dos posibilidades de pernocta: un Área Parking y un Área con “poste de Servicios” (D71 Rue De L´enchanteur Merlin), la cual, en principio, puede acoger a muchas caravanas ya que existe la posibilidad de aparcar en una zona de hierba.
Paimpont – Eurodisney (29 julio)
Distancia: 426 kms
Pernocta: Area AC Eurodisney (N48º52.689´-E2º47.101´, 20€).
Tras levantarnos y acicalarnos tomamos rumbo a Disneyland-Paris, sin usar el poste servicios de la zona ya que ponía “1 jeton”, es decir, una “ficha” y, como no teníamos ganas de liarnos, nos marchamos directamente. A 14 kms, encontramos un SuperU con el gasoil barato (1,09€, frente a los 1,22€ habituales) y un poste de servicio, así que hicimos un completo: vaciado-llenado, 2€ y deposito gasoil.
Poco más tarde, cogimos la autopista y nos pegaron una clavada de la leche!!. Se ve que las máquinas de peaje detectan automáticamente la altura del vehículo y no dan la opción de pulsar el botón “más bajo”, haciendo que el precio del viaje suba de 23€ a 40,80€, vamos, como si fuese un camión (eso que nuestra autocaravana es pequeñita y perfilada).
A eso de las 18:30, y después de bendecir al GPS mil veces por dirigirnos con certeza alrededor del cinturón de París, llegamos a Eurodisney, donde nos cobraron 20 eurazos por la pernocta en el área AC del parque, que no deja de ser un parking grande con wc pero sin sombra, sin luz y con tres postes de agua fuera del parking. Los mas “avispados” echaron unos cables a los enchufes de los baños. Viendo tanto ladrón, alargador y cable pensamos que no tardaría en saltar el general.
La idea era dejar a nuestra sufrida perrita en la AC con el Turbovent puesto, pero si hacía el mismo calor que había hecho ese día no estaríamos tranquilos, así que preguntamos por la guardería canina del parque, que por 10€ la tienen en unos cheniles con agua y comida y posibilidad de que la saquen a la calle o hacerlo tu mismo saliendo del parque.
Eurodisney – Chateaudum (30 julio)
Distancia: 220 kms
Pernocta: Area AC Chateaudum (N45º55.853´-E1º02.062´, gratuita)
Finalizado un día agotador, lleno de estrés por montarnos en todo y no dejarnos nada sin ver, por el miedo a que nos volviesen a cobrar otros 20€ por un área-parking sin nada, pusimos ruta a nuestro siguiente destino, Chateaudum, en ruta ya hacia Perigord, donde teníamos planificado llegar sobre las 23:00, pero unos atascos de miedo en la autovía rumbo a París hicieron que llegásemos a las 02:30 am. No aparcamos antes, por miedo a pernoctar en las cercanías parisinas y los posibles robos, por ello, hicimos un esfuerzo más y llegamos a un área donde no había nadie más que nosotros. De noche, daba algo de miedo la zona, ya que estábamos debajo de una enorme mansión situada sobre una roca y detrás teníamos lo que parecía un río, en una zona que daba sensación de desolación. Pusimos todos los candados, seguros y alarmas que teníamos y nos echamos a dormir.
Chateaudum – Oradour Sur Glane (31 julio)
Distancia: 300 kms
Pernocta: Parking Oradour Sur Lane
A eso de las 8:30, un ruido atronador nos despierta. Era un cortacésped industrial, de unos empleados del ayuntamiento cuidando un entorno que, por el día, mostraba otra cara muy distinta a la que habíamos visto por la noche. Estábamos en un área a los pies de un castillo, con un río y un parque preciosos justo detrás. No tardaron mucho en aparecer un par de ACs por la mañana y entablamos amistad con un chileno, casado con una alemana, que nos recomendó ir al parque de atracciones, “Europa Park”, que no tiene nada que ver con Eurodisney ya que vale 30€ la entrada y el parking está incluido. Para el año siguiente ya teníamos otro destino más para nuestra agenda.
Nos llamó la atención que el poste-servicios del área, contaba con una “boca” un tanto extraña, pero con un poco de “maña”, nos apañamos para llenar el depósito con los grifos del WC…a lo gratis…jeje.
Finalizada nuestra charla e intercambiado e-mails con los nuevos amigos, nos dirigimos a Oradour Sur Glane, pueblo masacrado en la 2ª guerra mundial, que se había dejado intacto para recordar las barbaridades que el ser humano es capaz de hacer.
Al llegar, el área AC (N45º56.118´-E1º01.508´), aparte de estar a tope, tenía el poste-servicio estropeado y como no nos apetecía ir hasta el próximo, a 5 kms, nos dirigimos al parking junto a la entrada del pueblo-monumento, donde había otras AC. En un par de horas, había tantas AC ahí como en el área, así que dormimos allí sin problemas.
Oradour Sur Glane – Brantôme (1 agosto)
Distancia: 96.5 kms
Pernocta: Área AC Brantôme (N45º21.622´-E0º38.876´)
Nos levantamos pronto para visitar el pueblo destruido a primera hora, ya que se preveía un día de calor y el perro no podía acompañarnos.
Oradour-sur-Glane era un pueblo en la región de Limousin, bajo control directo alemán desde 1942, después de la ocupación de la Francia de Vichy por la Wehrmacht. Su nombre se convirtió en sinónimo de barbarie, debido a su destrucción en 1944, cuando 642 de sus habitantes (hombres, mujeres y niños) fueron asesinados por miembros de las Waffen SS.
Después de la guerra se tomó la decisión de dejar las ruinas tal como estaban y reconstruir el pueblo de Oradour unos pocos cientos de metros más allá, para preservar la memoria de la destrucción. Actualmente, unas 300.000 personas visitan este memorial cada año.
Aquí tenéis un enlace al centro del memorial: http://www.oradour.org/
Tras un par de horas de recorrido y con el corazón en un puño viendo la decadencia humana, pusimos ruta a Brantôme, la denominada “Venecia” del Perigord, sinónimo un tanto pretencioso después de visitar el sitio. Aun así, merece la pena ver los canales, pasear por los jardines y descansar un poco, ya que en pocos días nos habíamos saltado la norma de “viajes cortos”.
El área era una inmensa campa, con servicio de agua (2€) a la entrada. Supuestamente, cobraban 3€ por la pernocta, pero no pasó nadie a cobrar…supusimos que por la mañana nos harían la “visita”.
Brantôme – Perigueux (2 agosto)
Distancia: 26.5 kms
Pernocta: Area AC Perigueux (N45º11.241´-E0º43.874´, 5€ servicios incluidos)
Efectivamente, por la mañana, un señor muy simpático nos hizo la “visita” y le pagamos los 3€ que valía la pernocta.
Hicimos una última visita al pueblo de Brantòme, por su rivera y su casco antiguo. Es un sitio muy tranquilo y agradable para pasear y, como veis en las fotos, para navegar con la piragüa.
Tras el paseo pusimos rumbo al Castillo de Hautefort, bajo un fuerte chaparrón. La entrada al castillo fueron 8.50€. Entramos más que nada porque llovía mucho fuera y no sabíamos qué hacer porque realmente el castillo sufrió muchos incendios y ha sido remodelado recientemente, por lo que no se conserva mucho de su origen y el mobiliario fue traído por su última propietaria.
Al finalizar el día, llegamos a Perigueux, donde teníamos dos posibilidades de pernocta: el área AC de la ciudad o un parking cercanos, junto al río. Optamos por la primera opción y así cargar agua. Al llegar, conocimos a un “forero” famoso, “Pere” y a su mujer, experimentados autocaravanistas, con quienes estuvimos charlando largo rato. Después pagamos al cobrador del parking.
No tuvimos tiempo de ver la ciudad pero por el paseo que había a la orilla del río se veía parte de la catedral y nos pareció espectacular. Nos apuntamos esta visita para otra ocasión.
Perigueux – St- Léon-Sur-Vézère (3 agosto)
Distancia: 96.5 kms
Pernocta: Area AC Saint Leon(N45º00.687´-E0º05.454´, poste de servicio con fichas 2€.
Por la mañana fuimos en busca de una sucursal del famoso “Narbonne”, suministradores de accesorios para autocaravanistas, y que nos costó un triunfo encontrar ya que estaba a 22 kms de Perigueux (N45º90´.57”-E0º34´24.51”). Y para colmo, como era lunes, no abrían hasta las 14:00.
Necesitábamos un convertidor de corriente porque se nos había estropeando el nuestro. Hicimos tiempo en un centro comercial Auchan cercano y a las 15:00 fuimos al Narbonne famoso. No está mal, pero hoy en día, con internet y los comercios especializados, cada vez más frecuentes en nuestras ciudades, no nos sorprendió demasiado.
Compramos un conversor 12/220 y algunas “chorraditas” más y acto seguido, rumbo al Castillo de Losse, cerca de Thonac, pero como estaba cerrado, nos quedamos en el pueblo de St- Léon-Sur-Vézère, el cual merece la pena visitar, pero sólo si te pilla en la ruta.
El área AC era una enorme campa, con algunos árboles y un poste de servicio, pero con funcionamiento mediante “jetons”, es decir, fichas que se pueden adquirir en el punto de información turística, en el ayuntamiento, el restaurante La Poste y en la panadería. Lo cual es una puñeta si llegas tarde y está todo cerrado, no hay manera de cargar agua.
St- Léon-Sur-Vézère – La Roque-Gageac (4 agosto)
Distancia: 39,4 kms
Pernocta: Area AC Roque-Gageac (N44º49.453´-E1º11.064´, poste servicio 2€).
Levantamos el campamento temprano y fuimos al Ayuntamiento a por los famosos «jetons» y tras cargar depósitos, nos dirigimos a La Roche st. Christophe, monumento protegido por la Unesco. La entrada cuesta 8.50€ y luego te permite visitar otros dos monumentos más de los cuales vimos la Maison Forte de Reignac por 5.50€. Ambos sitios son fortalezas escavadas en la roca, desafiando a la gravedad y sinceramente, merecen la pena visitar.
Tras comer en el área AC de los Eyzies (N44º56.333´-E1º00.555´) intentamos aparcar en el área de Sarlat, pero estaba llena y con poca previsión de librarse ningún sitio, así que buscamos un sitio para aparcar. Encontramos un gran parking cerca del centro, donde había unos cuantos autobuses, así que comimos y visitamos Sarlat. Merece la pena visitar esta ciudad, es encantadora, sobre todo su centro histórico, y está llena de músicos y vendedores ambulantes, lo que le da cierto encanto.
Tras la visita pusimos rumbo a La Roque-Gageac, donde encontramos sitio de pura chiripa en el área (como se nota que estamos en agosto…). Un pueblo fantástico, con su “gabarras” y todo…jeje. Precioso paisaje similar a lo visto con anterioridad, es decir, casas construidas aprovechando la montaña y un idílico paseo al atardecer junto al río.
Nos costó un rato pagar el parking, ya que la máquina no se hacía entender…jeje. Es del tipo que te encuentras en los aparcamientos de pago, solo que para pernocta. Primero hay que pulsar el botón amarillo, luego meter 5€ en monedas de 50 cms, 1€ o 2 € (he intentado colar el medio kg de monedas de 20 cms que tengo…pero para pernocta, no valen), y luego pulsar el botón verde. Sale el ticket y se coloca en lugar visible.
La Roque-Gageac – Beynac -Domme (5 de agosto)
Distancia: 14 kms
Pernocta: Area AC Domme (N44º48.064´-E1º13.308´, poste de servicio 2€.
Hoy ha sido un día un tanto decepcionante ya que hemos intentado ir al castillo de Chatelnaud, pero no había sitio en el parking de las AC, y tras subir hasta allí, por esa carreterita y con ese tráfico, para que te hagan dar la vuelta (porque ni siquiera nos dieron la opción de esperar a que se librara algún sitio), te quitan las ganas de volver.
Como información, decir que el parking cobran 3€ y no hay otro sitio donde aparcar.
Posteriormente, visitamos Beynac, donde el parking para autocaravanas estaba algo lejos pero al menos era gratuito. Quitando las pendientes, un sitio precioso para visitar y un castillo imponente.
Después de comer, nos dirigimos a Domme, donde teníamos fichada un área AC con poste servicios. La pernocta costaba 5€ y por lo que leímos en un cartelito, debía pasar un “cobrador”. Supongo que por la mañana nos llamarían a la puerta.
El área es relativamente grande, sobre todo comparando con las últimas que hemos visto. Habrá sitio para unas 20 autocaravanas y otras tantas en el parking de al lado, donde han aparcado sin problemas quienes han llegado más tarde.
Por la mañana, abandonamos el área sin que pasase ningún cobrador.
Domme – Sarlat la Caneda – Goufre de Padirac (6 agosto)
Distancia: 68 kms
Pernocta: Area AC Alvignac (N44º49.513´-E1º41.830´, poste de servicio gratuito.
Hemos vuelto a probar suerte en Sarlat La Caneda y hemos podido aparcar en el parking junto al área AC (y como no, junto al cementerio) y disfrutar de una ciudad con un casco medieval fantástico, muy bonito.
Por la tarde hemos visitado el Castillo de Fenelon, en Saint-Mondane, finalizando así la ruta de los tres castillos en los que se rodaron la película “Por siempre jamás”.
Como nuestra intención era ver al día siguiente la gruta de “Goufre de Padirac”, seleccionamos un área próxima, en Alvignac, donde llenamos aguas, pero antes de decidirnos a aparcar nos acercamos a nuestro destino, para investigar la zona. Hay un parking enorme de tierra para las autocaravanas, pero con horario limitado, prohibiendo el aparcamiento de ACs desde las 21:00 hasta las 6:00. Como había algunas ya, estuvimos a punto de tentar a la suerte pero finalmente, el “pepito grillo” nos obligó a ir al área que teníamos preparada, la cual estaba a tope. No es un área muy grande, caben unas 12 AC aprox y está un tanto inclinada, pero el suelo es de asfalto y el poste servicios (sólo agua) es gratuito.
Goufre de Padirac – Collonges la Rouge (7 agosto)
Distancia: 35 kms
Pernocta: Area AC Collognes la Rouge (N45º03.505´-E1º39.546´, 5€ la noche, con agua incluida).
Por la mañana temprano, antes de desayunar, levantamos el campamento y fuimos al parking donde estuvimos a punto de dormir el día anterior. Confirmo que varias AC que estaban por la noche, allí seguían, por lo que la policía no pasó para echarlos de allí. Desayunamos con la tranquilidad de haber aparcado sin problemas y para las 9:00 estábamos en la cola de las grutas de “Goufre de Padirac”, las cuales abrían a las 8:30 y ya había más de media hora de cola!!.
La visita merece la pena, ya que te llevan en barca por el interior y la gruta es sencillamente espectacular. El punto negativo, el de siempre, 9.20€ la entrada y encima te “animan” a dar propina al guía y al barquero (ni que fuese Caronte). A la salida de la cueva, el tiempo de espera era de hora y media!!.
Tras la visita a las cuevas, pusimos rumbo al área de Collonges la Rouge, un pueblo cuya característica es que está construido en roca caliza rojiza y es verdaderamente bonito. Merece la pena verlo.
El área es grandecita, para unas 35 AC aprox., con servicios gratuitos de agua y, si te pilla el “cobrador”, 5 € la pernocta. El suelo es de piedrita y hay un pequeño bosque, pero no nos atrevimos a adentrarnos, por si nos quedábamos atascados en algún árbol, aunque si había una camper.
Collognes la Rouge – Rocamadour – Bouzies (8 agosto)
Distancia: 100 kms
Pernocta: Area AC Bouzies(N44º28.981´-E1º38.720´, parking y agua gratis.
Un destino obligado en este viaje era el famoso Rocamadour, lugar de peregrinaje para los creyentes y de contemplación para el resto de los mortales, que nos maravillamos con las construcciones que es capaz de realizar el ser humano, desafiando la gravedad y dando lugar a obras tan increibles como esa.
Primeramente, aparcamos en el parking de arriba, junto al castillo, donde se puede pernoctar (N44º48008´-E1º36.996´), aunque decidimos ir al parking de abajo a comer y visitar más cómodamente el pueblo. En este parking, no parece haber problemas para dormir (N44º47.923´-E1º37.159´).
Tras debatir si dormíamos allí o no, volvió a manifestarse nuestro espíritu inquieto y pusimos rumo a Bouzies, donde había un área muy maja junto al río y que ofrecía servicio de carga y descarga de aguas gratis. Si decidís ir a esta área, os diré que sí, hay que pasar por “ese” superestrecho puente. Destacar que el paraje es increíble, con unas vistas muy bonitas y una noche preciosa. Existe desde el área un paseo que va por la ribera del río bastante transitado por las vistas que ofrece.
Bouzies – Saint Cirq-Lapopie – Cahors (9 agosto)
Distancia: 27 kms
Pernocta: Area AC Cahors (N44º26.397´-E1º26.351´ – parking y agua gratis).
Por la mañana, tras desmontar el grifo del área de Bouzies para poder enchufar nuestro adaptador (no fuimos los únicos, ya que salió muy fácil), visitamos St. Cirq-Lapopie, lugar obligado por su belleza, siendo otro de los pueblos catalogados como “los más bellos de Francia”.
Comentar que tuvimos un percance al abandonar el pueblo, ya que la salida era otro puente estrecho, como por el que pasamos el día anterior para ir a Bouzies, por donde sólo cabe un vehículo. Me lancé directo al puente pensando que unos ciclistas se iban a esperar al otro lado…pero no fue así, entraron también y además se sumaron decenas de coches en ambas direcciones del puente. Finalmente, reculamos, guardándome el orgullo, al ver a la gente de los coches que venían en dirección contraria bajarse. La policía me echó la bronca y yo se la eché a ellos, pero como ninguno nos entendimos…seguimos nuestro camino.
Finalmente llegamos a Cahors, una ciudad cuyo casco histórico no vale mucho, pero tiene un puente antiguo que es una pasada y una fuente romana con más de 2000 años de antigüedad. Sinceramente, lo que más vale de Cahors es su ribera.
El área AC era muy pequeña, donde legalmente, cabían unas 5 autocaravanas, subiéndose a la hierba…10, pero a 50 mtrs., hay un parking pegado al río donde aparcamos sin problemas. Teníamos unas vistas increíbles del río, los patitos y las barcas que navegaban por él. Como inconveniente, comentar que un puente por donde pasa el tren está relativamente cerca, lo cual puede llegar a ser molesto. Nosotros no tenemos problemas porque hemos cogido la costumbre de dormir con tapones.
Cahors – Vieux-Boucau (Las Landas francesas) (9 y 10 de agosto)
Distancia: 280 kms
Pernocta: Area AC Camping, Vieux-Boucau (N43º47.730´-W1º24.292´, 11€, aguas incluidas).
El itinerario que teníamos medio preparado terminó ayer, pero como todavía teníamos algunos días más, decidimos nuevamente mojar los pies en el mar. Tras varios intentos fallidos de reservar en algún camping cercano a la playa (ilusos de nosotros), nos lanzamos nuevamente a la aventura, dirigiéndonos a Biscarrosse, donde había un área en el centro comercial Leclerc, con un poste servicios, pero por lo que pudimos malentender al guardia de seguridad, no se podían aparcar las AC hasta las 20:00 y amablemente, nos invitó a que nos fuéramos, cosa que ya habíamos decido por lo sucia y desaliñada de la zona, por lo que pusimos rumbo a Contis-plage y a Saint Girons Plage, a ver si había más suerte.
Como nos habíamos temido, no hubo suerte en las dos alternativas anteriormente mencionadas y, encima está prohibidísimo aparcar en las playas con una AC (o tienes sitio en el camping o en el área AC o “te largas”).
Un tanto cansados y desilusionados por los carteles de “normativa especial de regularización del aparcamiento de autocaravas” en cada pueblo que dejábamos atrás, llegamos a nuestra penúltima opción, Vieux-Boucau, donde el GPS nos indicaba un área AC, perteneciente al camping y que costaba 11€ la noche. Al llegar vimos un mini sitio entre dos toldos (bien extendidos, con las sillas y las mesas sobresaliendo y ocupando más de la cuenta), pero como estábamos hartos de dar vueltas y no encontrar aparcamiento, nos envalentonamos e hicimos encaje de bolillos para meter la auto en el hueco, aparcando al milímetro, pero sin arrancar ningún toldo. Cuando llegaron los dueños de las autocaravanas adyacentes, nos empezaron a pitar los oidos. Odio la falsedad existente muchas veces entre los autocaravanistas, saludando cordialmente en la carretera, pero luchando como lobos por extenderse al máximo, sin importarles estar ocupando el doble del espacio necesario.
Una vez remojados los pies en el Atlántico y más relajados, tuvimos una distendida charla con un chaval de Cantabria, que nos explicó un truquillo para alargar nuestra estancia en el área, la cual, legalmente es de 48 horas. Si la cosa funciona, nos quedaremos algún día más.
La teoría es que hay que salir con el vehículo y volver a entrar para poder pasar otras 48 horas en el parking ya que debe haber sensores de peso en el suelo. De todas maneras, nadie controló quiénes estábamos aparcados ni el tiempo que llevábamos.
Parece que al encontrarse todos los campings y áreas llenos, la policía permite la pernocta en la calle, ya que había algunas autos aparcadas en la carretera.
Vieux-Boucau – Vitoria-Gasteiz (11 de agosto)
Distancia: 180 kms
Pernocta: en nuestra camita!!
El mal tiempo y las noticias de la entrada de una nueva borrasca, nos anima a levantar el campamento y volver a casa. Antes de eso, decidimos volver costeando y conociendo algunas áreas para próximas salidas. El área de Capbreton, muy conocida, realmente, da pena ya que está a tope, sucia y un tanto desordenada, por lo que no pasamos más tiempo de necesario. Pusimos rumbo al siguiente área, cerca de Anglet en Ondres, donde había sitio y con acceso directo a la playa (N43º34.573´-W1º29.173´). Es un área donde caben 25 AC y hay borne de luz para 12, así que los ladrones son imprescindibles.
Partimos después hacia el área de Biarritz, la cual está realmente imposible, así que un tanto ya cansados, pusimos rumbo a casa por autopista. Una ducha de las buenas…y a dormir en un colchón viscolástico!!! jeje.
Anónimo
gracias por toda vuestra información!!!! segur nos servira….Javi y Inés